VENEZUELA:
“Pueblo de Caracas, muerto el General Juan Vicente Gómez, aquí vamos a instaurar una democracia con orden y respeto, sólo les pido calma y cordura”
“CALMA Y CORDURA”
William Cárdenas Rubio / Análisis Libre, Madrid
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Estas fueron las palabras del General Eleazar López Contreras tras el fallecimiento del Gral. Juan Vicente Gómez, el 17 de diciembre de 1.935, que puso fin a los 27 años de dictadura gomecista.
Los hechos ocurridos el 9 y 10 de enero pasados dejaron mucho desconcierto en la oposición venezolana y esto es comprensible. Pero en medio de esta confusión lo que no es lógico es que la oposición confunda sus objetivos y le de por atacar a la Corte Penal Internacional (CPI) y a su Fiscal Karim Khan.
El objetivo es y sigue siendo derrocar el régimen usurpador y tiránico de Nicolás Maduro. Que Maduro se haya juramentado como Presidente para el período 2025-2031 era algo previsible, que tenía que ser contemplado en los diferentes escenarios que evaluaron los especialistas.
Lo ocurrido no hizo más que perfecccionar el delito de fraude electoral de Nicolás Maduro y convertirlo en un dictador sin ningún tipo de legitimidad, sumando un argumento más a favor de quienes luchamos por su salida.
Pero entender que lo sucedido nos deja sin opciones, y convertir ese desconcierto en ataques contra la única institución que ha dado los pasos necesarios para ver ante la Justicia Internacional a los culpables de los crímenes de lesa humanidad ocurridos en Venezuela en los últimos 23 años, es perder el norte.
Hasta Hugo Chávez supo entender con su “por ahora” de 1992, que derrocar una democracia estable le llevaría más de un intento, y sólo fue hasta 1998 que lo logró, cambiando la estrategia armada por la vía electoral.
Atacar a la CPI nos colocaría al lado de quienes, desde el gobierno chavista, están haciendo esfuerzos para desplazar al Fiscal Karim Khan del Caso Venezuela I, agregándonos a sus propósitos y objetivos.
Sobre este importante asunto hay mucha gente opinando sin conocimiento de causa, nunca mejor dicho, guiados por emociones que son aprovechadas por el chavismo. No dudamos de la buena fe de aquellos, pero recomendamos seguir las opiniones de quienes venimos trabajando, dia a dia, este tema, desde hace muchos años.
El Caso Venezuela I, está desde el punto de vista sustantivo y procesal, a las puertas de que se dicten las órdenes de captura a solicitud de Karim Khan, una vez que se resuelva la infortunada solicitud de recusación del Fiscal impulsada por la “opositora” Fundación Arcadia.
No olvidemos que fue el Fiscal de la CPI quien en diciembre pasado, en la Asamblea de Estados Parte, el que solicitó la liberación de los menores encarcelados después del 28J, así como de las demás personas detenidas durante las protestas post electorales. La cifra de liberados supera las 900 personas.
Y que el régimen sigue atendiendo sus exigencias, entre ellas, volvió a recibir a la Delegación del Comité de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que había sido expulsada del país. Obviamente, los de la cadena de mando saben que a falta de otras amenazas contra su seguridad, la de la CPI es la más cierta.
Por ello pedimos calma, dejar de presionar indebidamente a un órgano que “actuará en forma independiente como órgano separado de la Corte… Los miembros de la Fiscalía no solicitarán ni cumplirán instrucciones de fuentes ajenas a la Corte”como reza taxativamente el Estatuto de Roma en su artículo 42.1;y mucho menos intentar interferir su trabajo.
La Justicia Universal es lenta, pero segura. Los criminales responsables de los crímenes de lesa humanidad en Venezuela no escaparán de ella.
Otra cosa será lo que pase después. Para lo que debemos prepararnos, a fin de diseñar las estrategias que garanticen que las Fuerzas Armadas venezolanas cumplan con la obligación que establece el mismo Estatuto de Roma, de colaborar con la CPI en la detención de los culpables y en su traslado a La Haya.
